LA UNIVERSIDAD CENTRADA EN EL ESTUDIANTE

La vida cambia, las situaciones cambian, los que tenemos la dicha de ser docentes debemos ir cambiando y actualizándonos conforme el tiempo, no dejarnos "comer" por los avances tecnológicos y cambios en las aulas que son ya una urgencia para poder ser tutores de los futuros profesionales, acá dejo algunas reflexiones que me han impactado y quiero compartirlas:

"Cuando el docente alcanza la humildad necesaria (e inteligente) para descubrir que su papel es facilitar y propiciar el aprendizaje, deja de lado la soberbia de sentirse el centro de la universidad y ello modifica sus actuaciones."

"Se puede sustituir al enseñante, instructor o docente tradicional, pero nunca se podrá sustituir al hombre o mujer que impacta y transforma la vida de sus estudiantes y su alrededor. Es decir, nunca ninguna tecnología o estrategia podrá sustituir al educador."

"No puede aceptarse una visión universitaria insensible o ajena a los estudiantes del futuro, porque eso sería agudizar el academicismo no humanista que ha dañado la conexión entre sociedad y universidad. "

<“Aprender a aprender” significa un traslado de la importancia o énfasis docente hacia la autonomía del discente para su propio aprendizaje. No significa que el docente abandone su tarea educadora, sino que deja, por un lado, su excesivo protagonismo y su figura central en los procesos de aprendizaje. Quien aprende, aprende desde sí mismo, en conjunción con los otros aprendientes. Esto ya constituye un cambio paradigmático en el que el docente universitario sigue siendo importante, pero no hegemónico en el aprendizaje.>

Sin expresión no puede haber educación. Puede existir la transmisión pasiva, impositiva, vertical de un docente que no aprende a aprender con sus estudiantes, pero nunca podrá ser eso un fenómeno educativo. Mucho menos en los entornos universitarios.> Siempre en el marco del respeto mutuo.

CÍRCULOS DE INFLUENCIA DE LOS EDUCADORES

"La educación de cara a los tiempos modernos se fundamenta en el ideal de perfeccionamiento tanto del hombre como de la sociedad."

"El docente debe estimular en el educando el desarrollo físico, emocional, intelectual, social, ético y espiritual. A través de los tiempos el maestro es visto como un modelo de la sociedad."

"Davini (1997) indica que el docente debe buscar su continuo crecimiento profesional. Para un buen desempeño en su quehacer educativo el maestro tiene que pensar en enriquecer su acervo profesional y los fundamentos de su conocimiento, destrezas, métodos educativos y pedagógicos. A mayor educación del maestro mayor serán los beneficios en el proceso de desarrollo educativo y cognitivo de sus alumnos."

‎"Freire (1993) dice que el maestro no debe dejar a un lado lo que el estudiante trae consigo de su comprensión del mundo; su manera de hablar, su manera de contar, calcular, sus saberes en torno a su mundo, su religiosidad, sus saberes en torno a la salud, el cuerpo, la mente, el ambiente y la tecnología."

"El siguiente círculo de influencia se refiere al proceso y espacios educativos. Es decir, todas aquellas acciones, interacciones, recursos o momentos que implican la relación entre docentes y discentes, incluidas las maneras de sentir, pensar y actuar en la dirección del proceso de aprendizaje."

"El tercer círculo de influencia es el mundo, entendiendo a este como la universidad, la sociedad, el país, el escenario global y planetario. Los docentes debemos reconocer que este círculo también es nuestra responsabilidad y motivo de nuestros esfuerzos. Es nuestra “aula grande”. La universidad como parte del mundo, pero también la universidad tratando de impactar e influir en ese mundo. "

"¡El siglo XXI es un siglo de retos! ¡El siglo XXI es un reto! Un docente que ama su profesión, que la siente desde lo más hondo, que anhela contribuir a la vida y a su realidad comunitaria y nacional, debe esforzarse por entender cómo es el siglo en que le toca vivir, porque eso le ayudará a entender mejor a sus alumnos y alumnas. Por eso precisamente deberá empezar por sí mismo. Para que al entenderse como persona, al amarse y quererse como tal, pueda, desde esa fuerza interior, ir hacia el mundo exterior a ¡transformarlo!"

"Necesitamos aprender a ser personas en este siglo, para poder ser educadores de este siglo.

Esto significa, descubrir cómo ser más plenos, en el plano personal, y solo así, mediante el ejercicio docente, podremos influir en lo que ocurra en este siglo."

"La educación es el más poderoso instrumento que poseemos para cambiar el comportamiento de las personas. Su poder radica en su capacidad para cambiar la morfología y el funcionamiento del cerebro."