martes, 24 de agosto de 2010

COMPLICACIONES CRÓNICAS: VISION


COMPLICACIONES CRÓNICAS:

Las enfermedades que afectan al ojo en la diabetes son:

1. Retinopatía

2. Cataratas: pueden ser cataratas seniles precoces que se desarrollen a una edad más temprana en personas con diabetes, o una forma de catarata más propia de la diabetes que está relacionada con los cambios del control diabético.

3. Iritis: las personas con diabetes con un mal control glucémico tienen predisposición a sufrir inflamaciones del ojo llamadas iritis. Es una afección dolorosa que requiere una evaluación oftalmológica inmediata y tratamiento.

Retinopatía diabética: La retinopatía diabética es una complicación que produce lesiones en la red de capilares que irriga la retina. En sus etapas iniciales, la retinopatía diabética es una afección asintomática. Las personas suelen ver bien hasta que tienen una hemorragia en el ojo.

Cuando se producen los síntomas la enfermedad suele estar bastante avanzada. Esto hace que el tratamiento resulte mucho más difícil y los resultados sean mucho peores.

Por lo tanto, es fundamental examinar la retina con regularidad como parte de las revisiones en la diabetes.


¿Cuándo debería examinarse a las personas con diabetes para ver si tienen retinopatía?

Las personas con diabetes tipo 1 no suelen vivir demasiado tiempo sin que se les diagnostique. Por lo tanto, si la persona tiene más de 10 años, deberían realizarse exámenes para detectar posibles complicaciones a los 5 años del diagnóstico inicial de diabetes.

Por otra parte, las personas con diabetes tipo 2 podrían llevar con la enfermedad muchos años sin saberlo. En el momento del diagnóstico, el 30% de las personas con diabetes tipo 2 ya tiene alguna complicación. Por esta razón, es importante realizar un examen para detectar complicaciones en caso de diabetes tipo 2 en el momento del diagnóstico.

Tras el examen inicial, las personas deberían ser evaluadas cada 1 ó 2 años a partir de dicho momento, según el estado de la retina. Sin embargo, podría ser necesario realizar evaluaciones con más frecuencia si el estado de la complicación es grave o si la persona lleva mucho tiempo con diabetes.

Antes de tratar la retinopatía, debería hablarse sobre el problema de la visión borrosa en las personas con diabetes. Las personas experimentan cambios osmóticos en la lente debido a la fluctuación de los niveles de glucosa; en otras palabras, la lente cambia de forma, y la visión se vuelve borrosa. Esto aterroriza a muchas personas, ya que temen que sea el principio de la ceguera. Es necesario tranquilizarlas, ya que la visión borrosa mejorará varias semanas después de que se establezcan los niveles de glucosa en sangre. También se les debería aconsejar que no se pongan anteojos durante este período.


La visión borrosa también podría deberse a otras manifestaciones del ojo: podrían descartarse mediante examen oftalmológico.

En cualquier otro momento, aproximadamente un 30% de las personas con diabetes tiene alguna forma de retinopatía. Pero es importante indicar que tan sólo entre el 6 y el 13% desarrollará una retinopatía que ponga en peligro su vista. Por lo tanto, si una persona desarrolla unos pocos microaneurismas en el ojo, no significa que sea el comienzo de una ceguera; tan sólo un pequeño porcentaje de personas progresará hasta desarrollar una retinopatía peligrosa para su vista. Por lo tanto, una vez que se conozca el grado de retinopatía presente, se debería tranquilizar a las personas, si es lo apropiado.

Hay muchos factores de riesgo que influyen sobre el desarrollo de retinopatía. Éstos son:

  1. Un mal control glucémico.
  2. Cuanto más tiempo haga que la persona tiene diabetes, más probabilidades tendrá de desarrollar retinopatía. El nivel de control glucémico y la duración son los dos rasgos que mejor predicen la retinopatía.
  3. Otros rasgos que predicen bien el riesgo pero en menor grado son la hipertensión, la hipercolesterolemia y la enfermedad renal.
  4. El embarazo es otro factor de riesgo.

En personas mayores, la presencia de cataratas y otros factores relacionados con la edad, como tener las pupilas más pequeñas, hace que la visualización del fondo del ojo sea más difícil.


Las lecciones clave a aprender son:

  1. Con el tiempo, aproximadamente el 100% de las personas con diabetes desarrollará retinopatía en algún grado.
  2. Cuanto peor sea el control glucémico, mayor será el riesgo de retinopatía
  3. Hay distintos grados de retinopatía, que se definen meticulosamente según los signos clínicos presentes. Con un buen control, la mayoría de las personas con retinopatía no perderá la vista.
  4. La terapia láser ha demostrado que, sin duda alguna, salva la vista. Si se aplica tratamiento láser cuando la visión aún es clara, el tratamiento es más eficaz.
  5. Ya que la retinopatía es asintomática en sus primeras etapas, es necesario que un profesional experimentado en la enfermedad diabética del ojo realice exámenes oculares con regularidad.

No hay comentarios: